La avena, es una excelente fuente de fibra, vitaminas y minerales como el magnesio, el hierro y el zinc. Además, el Kefir es una fuente de proteínas y aminoácidos esenciales, calcio, vitamina D y probióticos.
La combinación de avena y kéfir proporciona una excelente cantidad de fibra, que promueve una digestión saludable y ayuda a prevenir el estreñimiento. Además, los probióticos presentes en el kéfir ayudan a mantener un equilibrio adecuado de bacterias en el intestino, lo que mejorara la salud digestiva en general.
Potenciar la avena con probióticos en ayunas, es una buena fuente de energía para nuestro cuerpo.
Preparación para 2 porciones
1/3 de taza de avena en hojuelas
160 mililitros de Kefir de leche de almendras
20 gramos de arándanos
Llevar a la nevera durante toda la noche o deja reposar de 2 a 3 horas para disfrutar de un desayuno delicioso.